Cómo debe ser el orden y las prioridades de vacunación  

Actualmente se están llevando a cabo al mismo tiempo las campañas de vacunación, tanto para la gripe o contra el COVID-19.  

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Aplicación de vacuna contra el COVID-19 en adulto mayor Foto ilustrativa

Alejandro Chirino, médico de la Asociación Argentina Respiratoria asegura que “es prioritario que las personas con enfermedades respiratorias reciban la vacuna contra el COVID-19, dejar de lado las vacunaciones de invierno”.

 

Otro dato que aporta es que “es importante vacunarse contra la gripe o contra el neumococo, que causa neumonía”.

 

 

Luego, insiste “sugerimos a los pacientes que es prioritario vacunarse contra el COVID-19”.

 

 


Alejandro Chirino, es coordinador de la Sección Infecciones Pulmonares de la Asociación Argentina de Medicina Respiratoria (AAMR).

 


Chirino además, aclara “ "si reciben notificación de fecha de vacunación de COVID-19, difieran la vacunación antineumocócica y/o antigripal y prioricen la anti Covid-19", insiste.

 

Sobre este punto insistió en que "hay que vacunar lo más que se pueda, a la mayor cantidad de personas posible".

"Identificar rápidamente los casos", a las personas con síntomas respiratorios, aconsejó el especialista, quien pidió "hacer los test de PCR para confirmar el diagnóstico y de esta forma aislarse y escudar a los contactos estrechos para poder mitigar lo más que se pueda el impacto de esta segunda ola".


La mejor forma de protegerse contra la gripe es vacunarse todos los años.

 

 


Es evidente que durante el invierno ocurre un incremento significativo de las infecciones del tracto respiratorio. El motivo es el aumento de la circulación viral, donde diminutos microorganismos encuentran en esta época del año condiciones excepcionales para su persistencia en suspensión en el aire y la transmisión por esa vía o por contacto a la vía respiratoria de otras personas.

Por este motivo, es importante vacunarse contra la gripe o contra el neumococo, que, si bien es una bacteria, también se vuelve más frecuente en el invierno y causa neumonía.

Las vacunas contra la gripe generan la formación de anticuerpos en el organismo alrededor de dos semanas después de su aplicación. Estos anticuerpos brindan protección contra las infecciones causadas por los virus contenidos en la vacuna.


 

Hay dos tipos de vacunas antigripales disponibles, las trivalentes, contra dos cepas de los virus de gripe A y un linaje de Influenza B, y las vacunas tetravalentes o que cubren contra dos subtipos de los virus de gripe A y dos virus B, por lo que brindan una protección más amplia según la cepa circulante”, precisa el especialista en vías respiratorias.

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